martes, 4 de noviembre de 2014

El pueblo de Dios contra el imperio.


Fragmento del artículo de Pablo Richard "El pueblo de Dios contra el imperio. Daniel 7 en su contexto literario e historico"

En el presente de América Latina : como en el tiempo de Daniel y en el movimiento apocalíptico posterior, también hoy vivimos el enfrentamiento Imperio-Pueblo . Este enfrentamiento no se da preferentemente en el terreno político-militar, sino en el terreno cultural, ético, espiritual y teológico. 

El poderío militar del imperio es tan grande, que los países del Tercer Mundo difícilmente pueden desafiarlo en ese terreno. El caso de Nicaragua es trágicamente aleccionador. El imperio declaró la guerra y el bloqueo económico a ese pequeño país, sometiéndolo a un proceso de desesperación violencia y miseria económica. Por eso los pueblos pobres evitan el enfrentamiento militar directo con el Imperio, y se enfrentan en aquellos campos de batalla donde los pueblos son fuertes y el imperio es débil. 

El libro de los Macabeos defiende aparentemente la lucha armada contra la bestia helenística, pero según el mismo libro la fuerza del Pueblo de los Santos no está en las armas, sino en su fuerza ética y espiritual (“...en la guerra no depende la victoria de la muchedumbre del ejército, sino de la fuerza que viene del cielo...1 Mac 3,19). Todo el libro de Daniel insiste en ese enfrentamiento espiritual con la bestia. A veces se tiene la impresión de pacifismo y pasivismo, pero esto es falso, pues la alternativa no es lucha militar o lucha política, sino sometimiento a la bestia o enfrentamiento con ella, poniendo toda la confianza en la fuerza ética y espiritual del pueblo. Lo radical y lo que da la victoria es esta fuerza espiritual del pueblo.

Brevemente podemos describir el enfrentamiento actual del Pueblo de Dios con el imperio, en los terrenos cultural, ético, espiritual y teológico. No es enfrentamiento super-estructural, sino que son dimensiones profundas de una práctica de liberación. El enfrentamiento cultural, ético, espiritual y teológico con el Imperio se da al interior de los movimientos sociales y populares de base. Es un enfrentamiento radical y con características apocalípticas:

En el campo cultural: la cultura del imperio es el consumismo, el individualismo, el espiritualismo que desprecia el cuerpo y la naturaleza. El Pueblo se enfrenta al Imperio con su cultura popular, que es cultura-comunidad, cultura-cuerpo, cultura-naturaleza; la cultura campesina, las culturas indígenas y afro-americanas reviven para resistir la cultura del Imperio.

En el campo ético: la ética del Imperio es la máxima ganancia; su fuerza es la mentira y el orgullo; domina sometiendo a los pueblos a procesos de desesperanza, deterioro, violencia y confusión. El pueblo de Dios se enfrenta a la Bestia haciendo de la vida humana el máximo valor ético. Lo bueno y racional, no es lo que produce ganancia, sino lo que produce vida.

El pueblo resiste con la esperanza, con la verdad y con su integridad moral.

En el campo espiritual: aquí el enfrentamiento es entre los ídolos de la muerte y el Dios de la vida; entre la idolatría y blasfemia de la bestia y la fe viva del pueblo de Dios.

En el campo teológico: el enfrentamiento es entre Imperio y Reino de Dios. Los que están con el Imperio están contra el Reino; los que están con el Reino de Dios, están contra el Imperio. La Iglesia proclama la radical contradicción entre Imperio y Reino de Dios. El Reino es escatológico, porque pone fin al Imperio. El juicio de Dios en la historia pone fin a los imperios y entrega el poder de Dios al pueblo de los santos del Altísimo.

Hoy día las Comunidades Eclesiales de Base siguen viviendo ese contexto histórico y ese movimiento espiritual apocalíptico. Para muchos ese enfrentamiento puede aparecer como demasiado radical, utópico y simplista (casi maniqueo), pero debemos entender que la apocalíptica es ante todo una revelación del misterio de Dios, del plan de Dios, de la voluntad de Dios. Es una forma de conciencia, para transformar la realidad. Es la reconstrucción del cielo, para construir aquí y ahora el Reino de Dios. El libro de Daniel nos revela esta dinámica del Reino y nos ayuda a descubrirlo en nuestra historia actual.

Fuente en papel: Revista de interpretación Bíblica Latinoaméricana Nro.7: "Apocalíptica: esperanza de los pobres"
Fuente: Claiweb.org

No hay comentarios:

Publicar un comentario