Por: Ramón Lobo | 27 de diciembre de 2011
Es un arte: acudir a un conflicto para observar lo que todos ven. Han pasado nueve meses y más de 5.000 muertos desde el inicio de la primavera en Siria. Se sabe quiénes son los buenos y quiénes los malos; también se sabe que existen interesesque dificultan que el Consejo de Seguridad adopte medidas contundentes y creíbles. Los observadores se envían para ganar tiempo, para retrasar la toma de decisiones. Ese tiempo que se gana por un lado, se pierde en otro. Sucedió hace 20 años en Bosnia-Herzegovina; sucedió antes y ahora se repite.
Han llegado hoy a Siria los primeros 40 observadores, informa BBC. Mientras hacían las maletas y subían a su avión, se intensificaron las matanzas y el cerco con carros de combate a Homs. Esa ciudad, centro de la represión, es su objetivo.
Sirios en Jordania./ Ali Jarekji (REUTERS).
En Siria hay argumentos para un informe equidistante, tan del gusto de las comisiones, pues surgió un grupo armado: el Ejército de Liberación de Siria, compuesto en su mayoría por suníes desertores de las Fuerzas Armadas deBashar el Asad, dominadas por los alauíes. Esta guerrilla se nutre de armas quellegan a través de las fronteras de algunos países que apoyan la vía diplomática impulsada por la Liga Árabe.
También resulta extraño el atentado del viernes en Damasco: 44 muertos y sin una firma clara. ¿Al Qaeda? ¿Los servicios de seguridad de Asad?
¿Están contados los días del régimen? Al Yazeera busca una respuesta.
Noticias desde Bagdad: Al Qaeda en Irak se hace responsable de los atentados de la semana pasada en Bagdad. Muqtada el Sáder, chií e importante aliado del primer ministro, Nuri al Maliki, pide elecciones anticipadas. Su rival en los pasados comicios, el laico Alaui, también.
Caso Ashtiani: Irán estudia cambiar la lapidación por la horca, pero la pena de muerte no se mueve, informa The Guardian.
Para aprender: Mark Lynch reúne en Foreing Policy los mejores libros sobre Oriente Próximo. BBC resume el año de las primaveras árabes, con algunos gráficos interactivos.
Otro actor que juega -amaga con dejar el poder y reprime, firma su renuncia con mano y tira el papel con la otra- es Ali Abdula Saleh, presidente-dictador deYemen. Viajará a EEUU por motivos de salud tras obtener algunas seguridades, informa The New York Times, que no especifica cuales son las garantías. Una podría ser garantizar su regreso a 'casa.
Washington es critico con el régimen yemení, pero también su principal apoyo; le considera clave en la lucha contra Al Qaeda. Washington teme que una lucha por el poder, que podría derivar en una guerra civil, impulse a los extremistas. Frente aYemen, geográficamente, Somalia, dominada en su mayor parte por el grupo Al Shabab, al que la CIA vincula con el universo creado por Bin Laden.
Mientras que Occidente, Kenia y Etiopía usan armas contra la milicia, el grupoWaayaha Cusub hace la guerra con otras armas: la música.
Más esperanza: The Christian Sciente Monitor publica su estado del mundo y concluye que es mejor de lo que esperaba. Un ejemplo: la lucha de la mujer por sus derechos. Junto al optimismo, este reportanje de BBC: los países ricos no están preparados para responder a las catástrofes naturales y a las hambrunas.
La campaña negativa entre los candidatos republicanos ha tenido dos efectos peores: la hartura de los votantes, que llegan exhaustos al caucus de Iowa (3 de enero) y sin un favorito claro, que es cuando empieza la primera semana clave de la larga carrera electoral y que entre tanto apuñalamiento interno se han olvidado de Barack Obama, quien empieza a recuperarse en las encuestas. Politicorecuerda algunas de las batallas históricas entre Newt Gingrich y el presidenteBill Clinton. The Washington Post asegura que en 2012, Obama será un verdadero conservador.
El año de Sarkozy en cinco minutos, por Liberation.
Una lucha constante: los derechos de la mujer.
Fuente: blogselpais.com